No más hombre del maletín

Señores, el hombre del maletín se jubila. Sí, dice que ya no puede más, que eso de estar subiendo y bajando las escaleras a cada rato le ha dado una hernia discal. Que el costo del celular no se lo cubre el gobierno -ya que no tiene la suerte de Jacobito, para que Porta le pague todas las llamadas-, que de tantos gases lacrimógenos ya llora espontáneamente. Sí. Él se jubila.

Dice que va a dar paso al hombre del saquillo, nuevo burócrata del Ecuador. Este hombre, mucho más práctico, va a llevar de una vez, y sin necesidad de subir y bajar tanto las escaleras, en un solo saquillo todo lo que necesite. Se dice que le han dado en el celular un plan de 5000 mensajes gratis, para que mensajee todo lo que necesite, y así nadie le reconozca la voz. Le han dado una máscara antigases, para que en medio de los lacrimógenos pueda seguir negociando. Además, le han dado lentes de visión nocturna, para que no se tropiece cuando suceden los inesperados cortes de luz.

Hoy tiene su primera prueba el hombre del saquillo. Por lo pronto está confirmado que su primera ronda la hará a eso de las 10 de la mañana. De antemano se sabe que va a ser el centro de las miradas, por eso le va a pedir a Cero Corrupción que arme algún alboroto fuera del congreso para que el se pueda colar; y, una vez adentro, encontrarle, de la manera más patriótica, una salida a la crisis que agobia al país.